En la escuela
La Asamblea por una Escuela Bilingüe (repárese: bilingüe) ha elaborado un informe que supone una completa radiografía del statu quo lingüístico de las escuelas catalanas,...
- ....al menos en sus objetivos declarados (pues siempre habrá docentes que atemperen por su cuenta el dogmatismo oficial en beneficio de la tolerancia, la eficacia y el sentido común).
- La metodología ha sido el cotejo sistemático de los proyectos lingüísticos publicados por los centros docentes. Siguen algunas conclusiones.
Así, por ejemplo, sabemos que ningún centro en Cataluña cumple con el mínimo legal de 25% de horas en lengua castellana en asignaturas troncales y con el material didáctico en esta lengua.
- Es interesante observar que el curso que viene 75 centros catalanes —61 públicos— sí ofrecerán un tercio del horario lectivo en lengua francesa, por lo que el problema no parece ser el deseo de salvaguardar a todo trance la inmersión total en catalán, sino asegurar la radical exclusión del español, lazo afectivo con España que no conviene potenciar.
- Lo corrobora que casi el 100% de los proyectos lingüísticos —que abundan en consideraciones identitarias, a veces de carácter étnico, como el que da en distinguir entre alumnos catalans y alumnos castellans-espanyols— vete el uso del castellano en todos los ámbitos del centro: aula, pasillos, patio o comedor.
- No parece del todo infundada así la leyenda, que siempre costó creer, de que el nacionalismo fiscaliza la lengua que usan los alumnos en el recreo (un informe de Plataforma per la Llengua revela que en zonas urbanas los alumnos usan con preferencia el español; se desconoce cómo se obtuvieron los datos).