No podemos ser indiferentes a lo que está pasando en Venezuela

Lo que a estas alturas es incontestable, a la luz de los datos aportados por el chavismo y la oposición, es que el vencedor de las elecciones de julio fue Edmundo González, no Maduro.


​​Opinión obtenida del blog personal de Rafael Arenas (10/Ene./2025).​ Leerlo en el sitio web original.

La piedra angular sobre la que ha de sentarse cualquier análisis de la situación es la verdad; porque lo que a estas alturas es incontestable, a la luz de los datos aportados por el chavismo y la oposición, es que el vencedor de las elecciones de julio fue Edmundo González, no Maduro. A partir de ahí, no solamente las mentiras del régimen, sino la violencia ejercida contra la oposición es ilegítima, cuando no criminal.

Y aún dando todo el beneficio de la duda a quienes apoyaron al régimen de Maduro hasta el pasado julio, a la luz de lo sucedido a partir de entonces, no hay ninguna excusa para quienes, habiendo apoyado a Maduro, no hayan mostrado públicamente su rechazo al régimen y su reconocimiento de la victoria de la oposición.

De todo lo que están haciendo los socialistas, lo peor es la connivencia con el régimen de Maduro.

Y entre estos que han apoyado al régimen de Maduro están miembros del gobierno socialista y personas, como Zapatero, que comparten cartel en los mítines con el actual presidente del gobierno. De todo lo que están haciendo los socialistas, lo peor es la connivencia con el régimen de Maduro. Peor que la genuflexión a los nacionalistas, peor que la amnistía, peor, incluso, que el ánimo divisivo entre los españoles del que hace gala Sánchez.

Peor porque aquí estamos hablando de detenidos, torturados y muertos; detenidos, torturados y muertos por un régimen que mantiene vínculos con Zapatero y que ha tenido (o aún tiene) relaciones estrechas con miembros del Gobierno de España.

Es repugnante.