Extracto de la entrevista.
ABC.- En el libro defiende que, salvo en defensa, justicia y orden público, lo ideal es que en el resto de actividades se impulse una mayor participación ciudadana. Pero muchos de los quebraderos de cabeza que en España tienen que ver con el nacionalismo se deben al hecho de haber cedido la competencia de la educación a las comunidades autónomas.
- MVLL.- La educación fue una de las concesiones más equivocadas que hizo la España democrática, creyendo que así frenaba el nacionalismo. En el País Vasco y en Cataluña, administraciones nacionalistas han utilizado la educación como un gran instrumento de adoctrinamiento y han creado esos monstruos que son los nacionalismos.
ABC.- Ortega y Gasset ya advirtió, en su momento, que el movimiento independentista de Cataluña y del País Vasco serían en el futuro uno de los grandes problemas de España. ¿Cómo es posible que un siglo después siga sin resolverse?
- MVLL.- Es que es un problema creado artificialmente. Es una gran paradoja, porque ni el País Vasco ni Cataluña van a ser independientes, nunca. En Cataluña es donde más cerca ha estado el peligro de arrastrar a una población entera a una locura suicida, que es lo que hubiera sido si prevalecía la independencia. Pero no va a ocurrir. España está integrándose en una realidad política, social, económica, cada vez mayor, como es Europa. Ese proceso representa el progreso. Pero el avance de la civilización nunca ha sido fácil, siempre ha provocado sus enemigos, y eso, en el caso de España, toma la forma del nacionalismo regional extremo.