¿Qué pasaría si en su país en una región, le prohibieran estudiar en la lengua común y oficial? Seguramente ustedes protestaría ante la administración pública. ¿Pero qué harías si esta al ignorara e incluso le torpedeara por reclamar su derecho a que sus hijos también estudiaran en la lengua oficial de su país? Es probable que usted fuera a la justicia a reclamar sus derechos ¿Qué pensarías si viera que esa administración incumple la sentencias y además se da carta blanca a acosar y denigrar a los jueces?
En la región española de Cataluña ocurre todo esto. Los niños no pueden estudiar en español, las familias no logran ejercer sus derechos porque el gobierno ultra identitario no deja ninguna opción, solo permite el monolingüismo catalán. Muchas familias acudieron a los tribunales y obtuvieron la seguridad de que sus hijos podrían cursar al menos un 25% del currículum escolar en español, pero el gobierno catalán ha usado su poder para exigir a los centros que no impartan nada en castellano, Se fomenta que incluso en el recreo se prohíba utilizar el español. No hay piedad para niños sordos o del espectro autista que necesitan utilizar su lengua materna.
"Las sentencias están para cumplirse" ha dicho el comisario de Justicia, Didier Reynders, en Madrid. "Hay que cumplir -ha dicho- las decisiones judiciales y primero son las autoridades nacionales las que deben adoptar las medidas necesarias para conseguirlo" Pero el gobierno central no actúa, no protege a las familias, no protege la libertad de conciencia. La propia esencia del pluralismo ideológico está en juego. Es sin duda uno de los fundamentos de un Estado de derecho democrático. Pero progresivamente, durante décadas, en Cataluña se han ido imponiendo rasgos de un régimen identitario ultranacionalista excluyente y tabús, callando bocas, oídos y ojos para no ver, para no sentir esa pérdida de libertad.
¡Basta ya!
Fuente.- Oficina Mayte Pagazaurtundúa
