Societat Civil Catalana asegura que el único relator válido es la Constitución y recuerda que los partidos secesionistas ni siquiera representan a la mayoría de los catalanes
Societat Civil Catalana asegura que la figura de un relator encargado de mediar en las reuniones entre PSOE y Podemos y los partidos secesionistas sólo comporta más enfrentamiento y división entre los catalanes.
- La entidad recuerda que la mayoría del pueblo catalán quiere continuar formando parte de España y no se siente identificada con el discurso rupturista de los partidos independentistas catalanes.
La asociación sostiene que cualquier propuesta de diálogo para resolver el conflicto actual requiere el máximo respeto al Estado de Derecho y la máxima predisposición a encontrar una salida que pueda satisfacer a la inmensa mayoría.
- En una democracia constitucional como la nuestra la mediación a los problemas políticos está perfectamente establecida.
- La Constitución y las leyes democráticas son el instrumento de mediación que nos hemos dado entre todos para afrontar los desacuerdos políticos y sociales.
El cauce normal del diálogo son las instituciones democráticas y éstas tienen establecidos sus mecanismos de diálogo político y reforma.
- Lo adecuado sería, por tanto, un amplio diálogo sereno y constructivo en el seno de la Comisión Constitucional del Congreso de los diputados, tal como promovieron los partidos constitucionalistas en el otoño de 2017, porque la única tutela posible al diálogo es el de la soberanía nacional.
- De hecho, podría tener sentido compaginar este debate político sereno en el Congreso con una comisión política en el Parlamento catalán para abordar entre todos la crisis política que atravesamos.
Por otro lado, la entidad defiende que ha llegado el momento de fomentar la convivencia, la concordia y el entendimiento entre los catalanes impulsando medidas que respeten el Estatut de Catalunya, la Constitución y todo el marco legal.
- El método, por tanto, establecido para abordar esta situación no es el más adecuado y las fuerzas políticas secesionistas no cumplen con los requisitos indispensables para abordar este conflicto.