Una patria es, ante todo, proyecto y misión
El día 12 de octubre es la Fiesta Nacional de España, porque una patria es, ante todo, proyecto y misión.
- Por ello, coincide de forma afortunada con el Día de la Hispanidad, que sintetiza la tarea histórica de España en el mundo.
Reivindicamos el patriotismo español que, aunque no debe quedar constreñido a una fecha simbólica, sí se manifiesta en nuestras calles y plazas de Barcelona en ese día.
- Actualmente, nos han devaluado el patriotismo: unos, negándolo o atacándolo; otros, reduciéndolo a una vertiente exclusivamente constitucional (¡como si nuestra historia hubiera nacido en 1978!).
- Especialmente, el nacionalismo separatista se constituye en su adversario frontal, sin otra reacción que medidas tibias por parte de quienes tienen, en razón de su cargo, el deber de defender la unidad de España.
Nuestro patriotismo reúne una serie de notas diferenciales que conviene recordar:
- Nace del dolor de España, de la crítica ante sus imperfecciones, tanto en el ayer juvenil como en el hoy maduro.
- No se ancla en el pasado, porque una patria es una tarea ininterrumpida de muchas generaciones, las que fueron, las que son y las que serán.
- Forma una unidad indisoluble con los aspectos sociales: Ni patria sin pan ni hartura sin patria.
- Es integrador de personas y de territorios: España es una, varia y plural.
- Es abierto a la universalidad, como siempre lo fue en los mejores momentos.
Con este mensaje, los Veteranos de la OJE de Cataluña vamos a concurrir al acto unitario que tendrá lugar en la plaza de Cataluña el 12 de octubre de 2019.
- No somos en modo alguno comparsas, sino que pretendemos, al decir de Unamuno, chapuzarnos en pueblo.
Editorial publicado en el boletín Trocha,
de Veteranos OJE - Cataluña, el pasado 1 de octubre de 2019
de Veteranos OJE - Cataluña, el pasado 1 de octubre de 2019
Españolizar, hispanizar.
La misión, en estos momentos, es volver a españolizar a España, pues ya se han cuidado muchos ⎼propios y extraños⎼ de arrebatarnos de la razón y los sentidos la fértil virtud del patriotismo verdadero.
Olvidemos ahora ese uso simplista y reducido ⎼casi mostrenco⎼ con el que se emplea el verbo españolizar, cuando se quiere resumir a lo folclórico o a la pura efusión sentimental; bien está el pasodoble ⎼y la sardana, y la jota, y la muñeira…⎼ para hacer vibrar los resortes emotivos de una persona, pero españolizar debe ser otra cosa más profunda.
- Queremos decir que españolizar es comunicar a otros la identificación que siente la razón, la inteligencia y, también, el corazón con una tarea histórica llamada España; al decir histórica, ya no la podemos limitar al presente ⎼sucedáneo del patriotismo de algunos políticos⎼, ni al pasado ⎼cómodo refugio para evocar glorias antiguas⎼, sino a una continuidad ininterrumpida de muchas generaciones: y, claro está, también referida al futuro, ese que queremos distinto y mejor: España, nuestra hija, más que nuestra madre, decía Unamuno, porque la tarea de España debe ser transmitida a hijos y nietos, a ser posible mejorada.
El verbo españolizar es casi sinónimo de hispanizar, pues la misión vocacional española se llama Hispanidad; si fuimos europeos por voluntad (tras ocho siglos resistiéndonos a ser africanos o asiáticos), vocacionalmente, hicimos de lo hispánico nuestra razón de ser.
- De ahí que nunca se pueda confundir patriotismo con nacionalismo: el primero es abierto, generoso, misional; el segundo es cerrado, egoísta y no pocas veces se sustenta en la envidia o la animadversión hacia el vecino.
La misión, en estos momentos, es volver a españolizar a España, pues ya se han cuidado muchos ⎼propios y extraños⎼ de arrebatarnos de la razón y los sentidos la fértil virtud del patriotismo verdadero.
- Pero, simultáneamente, tenemos la obligación, de nuevo, de hispanizar; aprovechemos la oportunidad de ese Segundo Mestizaje y de la consiguiente Segunda Evangelización ⎼que ahora tiene la dirección de allá hacia acá⎼, para que ambos verbos se unan en perfecta sinonimia.
- Y ello, frente al localismo exacerbado que impide ser español completo, por una parte, y frente al término sesgado de latino, creado para denostar lo español y lo hispánico.
Doce de Octubre: venturosa y cabalmente coinciden la Fiesta Nacional de España y el Día de la Hispanidad. La fecha es un buen acicate para no cejar en una misión, personal y colectiva, acorde con nuestro ser de españoles.